En Hispasec Sistemas (la parte "corporate") prestamos servicios a empresas, normalmente de envergadura, que son las que hoy por hoy demandan este tipo de trabajos. Pero al ser más o menos conocidos, para bien o para mal, a menudo nos consultan también usuarios domésticos con situaciones de lo más variopinta.
Aquí van un par de casos de las anécdotas recibidas esta misma semana, que probablemente (seguro) no son aislados, aunque no me atrevo a hacer una extrapolación en números (para eso ya mienten las estadísticas).
Padre de familia que se presenta in situ, cara desencajada, portando un ordenador debajo del brazo. Resulta que ha recibido una carta de Telefónica donde le informan que se ha detectado que su IP/ordenador está enviando spam y que debe poner remedio, ya que de continuar la situación podrían tomar medidas judiciales. El hombre, desesperado, la única parte del escrito que entendía era que lo querían llevar a juicio.
Después de calmarlo y explicarle que no lo van a encarcelar, le echamos un ojo al ordenador (un Windows XP), y nos encontramos con lo previsible: una selva de bichos. Algunos especímenes interesantes, como un rootkit y variantes nuevas de la familia Rbot, spyware,... Tenía antivirus instalado y actualizado, de cuyo nombre no quiero acordarme. Le limpiamos el sistema e hicimos algunos cambios (navegador, etc).
Mujer de mediana edad, ésta no porta ordenador, pero se repite la situación de desesperación. Resulta que por la mañana se encontró con 2.800 euros menos en su cuenta, y le han dicho que es por culpa de su ordenador. Charlando con ella nos dice que ya le habían avisado de su entidad días antes del problema, pero que creía que ya estaba solucionado porque había hecho todo lo que le decían en el e-mail donde se lo advertían. Le explicamos lo que es un phishing y le aconsejamos que acuda a la entidad con todos los datos. Hoy nos ha llamado muy agradecida, le han resembolsado la cantidad.
El hecho de trabajar para empresas, donde hablas con personal de IT o del departamento de seguridad, hace que en el día a día utilices una jerga y des muchas cosas por obvias... deformación profesional. En lo particular, estas cosas más domésticas me sirven para no perder la perspectiva y la problemática con la que se encuentra el usuario final.
Por mucho que nos empeñemos en la in/formación al usuario, que dicho sea de paso toda es poca, la realidad es que siempre va a existir un porcentaje importante de personas que se sienten delante de un ordenador sin unas nociones básicas de seguridad. Si no somos capaces de introducir mejoras transparentes para el usuario (seguridad por diseño), la cosa sólo puede empeorar.